La Selección Argentina afrontará una doble fecha FIFA con dos partidos de alta exigencia. Primero visitará a Uruguay el viernes 21 de marzo en Montevideo y luego recibirá a Brasil el 25 en Buenos Aires, en un enfrentamiento que podría definir su clasificación al Mundial 2026 de Estados Unidos, México y Canadá.
Sin embargo, Lionel Scaloni debe considerar un factor clave: nueve de sus jugadores llegan al límite de tarjetas amarillas y, si son amonestados ante la Celeste, no podrán estar en el duelo contra la Canarinha en estas Eliminatorias Sudamericanas.
Los futbolistas que están en riesgo de suspensión son Alexis Mac Allister, Lautaro Martínez, Enzo Fernández, Rodrigo De Paul, Gonzalo Montiel, Giovanni Lo Celso, Exequiel Palacios, Leandro Paredes y Germán Pezzella. La mayoría de ellos son mediocampistas, lo que obliga al cuerpo técnico a tomar recaudos en esa zona del campo.
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La Albiceleste llega a estos compromisos con un plantel preliminar de 33 jugadores. Sin embargo, se espera que la lista definitiva quede reducida a 30, por lo que algunos futbolistas quedarán fuera de la convocatoria final. Entre los nombres que podrían no pasar el corte figuran Benjamín Domínguez, Santiago Castro y Máximo Perrone, aunque la decisión final aún no ha sido confirmada.
El desafío para Scaloni será administrar los minutos de los jugadores al límite para evitar bajas en el clásico. Aunque Argentina tiene un margen de tranquilidad en la tabla, enfrentarse a la Verdeamarela con bajas significativas podría complicar el panorama.
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El cuerpo técnico también analiza opciones en caso de que algunos de los titulares no puedan estar disponibles. Nombres como Guido Rodríguez, Nicolás González o Julián Álvarez podrían tomar mayor protagonismo dependiendo de cómo se desarrolle el partido ante Uruguay.
Con estos condicionantes, el combinado nacional encara una fecha clave que no solo puede asegurar su clasificación, sino que también servirá para medir su nivel ante dos rivales de jerarquía en Sudamérica y hacer feliz a su gente en una nueva oportunidad, como nos tienen acostumbrados en el último tiempo.
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