La quinta Las Mercedes es una joya histórica de Vicente López y corre peligro de ser demolida: su nuevo dueño proyecta lotear la propiedad para hacer un barrio privado.
Se trata de la mansión de la calle Tapiales 1930, ubicada a metros de la Quinta de Olivos y construida hace más de un siglo por el ingeniero Manuel Ocampo, padre de las escritoras Victoria y Silvina Ocampo (y también constructor de Villa Ocampo, la famosa residencia de Beccar que es actualmente patrimonio de la UNESCO). Es una edificación de 500 metros cuadrados, emplazada sobre un lote único de 6.600 metros cuadrados, circundada por una añosa arboleda parquizada por el arquitecto y paisajista Carlos Thays.
Fue diseñada y construida entre 1882 y 1896, y su propietario fue el doctor Juan Ramón Fernández, que unos años más tarde fue Ministro de Justicia e Instrucción Pública, durante la presidencia de Julio Argentino Roca.
Por un siglo fue la residencia de la familia de Juan Ramón Fernández, y hasta hace unos pocos años vivía allí uno de sus bisnietos. Pero, durante la pandemia, la propiedad se vendió a una persona de origen chino. “Como después de la venta no había movimientos, los vecinos nos preocupamos porque nadie compra una casa como esa para nada. Y se sumaron los rumores sobre un proyecto para lotear la propiedad y hacer un barrio privado. Entonces los vecinos presentamos una carta en la Municipalidad de Vicente López, y solicitamos que nos informen qué se iba a hacer. En ese momento nos dijeron que no había ningún proyecto, pero ahora sí lo hay: demolerán la casa y lotearán el enorme terreno que tiene una barranca natural con árboles de más de 200 años y un microclima único. Según la legislación eso no se puede modificar, pero para lotear tendrían que hacer una nivelación, con lo cual estarían modificando el hábitat”, detalló el arquitecto Alfredo Malatto, vecino de Olivos.
Además, remarcó que la casona “no está dentro del catálogo de Patrimonio Urbano de Vicente López, por lo que el nuevo propietario podría demolerla y lo único que recibiría es una multa de la municipalidad por no tener los permisos apropiados, pero nada más. Y eso podría suceder en cualquier momento”, alertó. “Por eso hicimos una carta de intención y un reclamo. El lugar es casi una reserva ecológica porque, junto con otra propiedad, son casi dos manzanas vírgenes que mantienen muchas especies originales”, explicó, con preocupación.
La mansión es de estilo ecléctico, porque toma elementos clásicos de distintas corrientes arquitectónicas, una tendencia que estaba muy de moda a finales del siglo XIX. Se llama Las Mercedes en honor a la esposa y una de las hijas de Juan Ramón Fernández, y fue residencia de veraneo familiar hasta 1977.
El terreno original era de ocho manzanas y llegaba hasta la costa, pero los diversos loteos que se hicieron a lo largo de los años lo redujeron notablemente. Situada en la loma de una barranca, en esa época la casona tenía vista al río, pero los edificios que se erigieron en las últimas décadas impiden esa vista ahora. En su construcción se tuvieron en cuenta los espacios amplios, la buena iluminación y una privilegiada orientación.
La propiedad se destaca por el enorme jardín que la rodea, parquizado por el prestigioso Carlos Thays; se dice que es una de sus primeras obras en la zona. Tiene una piscina y una gran diversidad de especies arbóreas como magnolias, lapachos y palmeras, y también conviven una gran variedad de aves silvestres.
La casa está desarrollada en tres plantas a las que se accede por una gran escalera con pisos de roble y un ascensor de hierro forjado, en perfecto estado y funcionamiento. Además, cuenta con carpinterías, herrajes y luminarias originales de fines del siglo XIX; y tiene grandes ventanas en todos los ambientes, lo que la hace sumamente luminosa.
Tiene un total de siete ambientes. En la planta baja está el living, el comedor y un escritorio. Además, tiene una cocina, un toilette y una amplia galería techada. En el primer piso hay tres dormitorios comunicados entre sí y dos baños unidos por un hall. La habitación principal tiene salida a una terraza con vista al jardín. En la segunda planta hay otros dos dormitorios y un baño, que durante años fueron dependencias de servicio.
Detrás de la estructura principal hay una casa más pequeña con galería de estilo colonial destinada a huéspedes o caseros. Aunque a lo largo del tiempo hubo algunas modificaciones, se bajaron los cielorrasos y se modernizaron la cocina y los baños, toda la estructura de la casa permanece igual.
Las Mercedes fue escenario de varios videos musicales y también se alquiló como set de filmación de la serie Los simuladores de Damián Szifrón, que Telefé emitió en 2001. Y en 2017 se rodó en esa misma locación la película El Ángel, de Luis Ortega, y también Palau de Kevin Knoblock.
Hijo de un acaudalado comerciante español, Fernández se doctoró en Medicina en septiembre de 1882. Trabajó en la maternidad del Hospital de Mujeres de Buenos Aires, y luchó por imponer normas de higiene y asepsia. Se especializó en ginecología en París, Francia y, a su regreso al país, dictó cátedra de obstetricia en la Facultad de Medicina. También fue parte de la Academia de Ciencias Médicas de Buenos Aires, y fundó y dirigió la Escuela de Parteras, a la que bautizó con el nombre de su más querido mentor, el doctor Pedro Antonio Pardo. Fue miembro de la junta directiva del Hospital de Clínicas y en el 1900 fue nombrado decano de la Facultad de Medicina.
También modificó el régimen de estudios de la Universidad Nacional de Córdoba y propuso la nacionalización de la entonces Universidad provincial de La Plata. Fundó la Escuela Reformatorio de Menores de la localidad de Marcos Paz. Y concluyó dos obras que había iniciado en el Hospital de Clínicas: la Escuela Práctica de Medicina y la Morgue.
A finales del 1800, Fernández publicó una serie de artículos sobre educación que llamaron la atención de las autoridades e hicieron que el presidente Julio Argentino Roca le ofreciera el Ministerio de Justicia e Instrucción Pública, en 1902. Inició la construcción del Palacio de Justicia de la Nación, y en el acto en que colocó la piedra fundacional del edificio sufrió un accidente cerebrovascular. Nunca logró recuperarse del todo y se retiró a su quinta Las Mercedes, donde falleció el 2 enero de 1911, a los 53 años.