En la ciudad de Buenos Aires, vuelve a recuperar terreno la construcción de edificios de viviendas con instalación de gas natural, una tendencia que había cedido espacio frente a proyectos completamente eléctricos. Este cambio responde a factores como la economía del gas natural frente a la electricidad, las mejoras tecnológicas en instalaciones y el retorno de una infraestructura capaz de sostener una mayor demanda.
En respuesta a varios accidentes relacionados con gas, no era habitual en los últimos tres años la construcción de edificios con instalaciones de gas natural. Sin embargo, su regreso plantea la necesidad de extremar medidas de seguridad y considerar su impacto en el diseño y funcionamiento de las nuevas construcciones.
Cómo habilitar las instalaciones y procedimiento
Marcelo Lezama, jefe de Nuevos Negocios de Metrogas, explicó a Infobae que las instalaciones de gas en nuevos edificios deben cumplir con tres condiciones fundamentales: 1) que exista una red de distribución en la puerta del edificio, 2) que ésta tenga el caudal suficiente para abastecer la demanda y 3) que la instalación interna cuente con la aprobación de la distribuidora.
El proceso de conexión a la red de gas comienza con el pedido de factibilidad, que verifica si la red de gas pasa por el frente del edificio y si el caño existente puede abastecer el consumo solicitado.
“Se presenta el proyecto de instalación interna del edificio, detallando cañerías, materiales, ubicación de medidores y reguladores. Un gasista matriculado lo realiza mediante la herramienta AVM (para matriculados) de Metrogas, mientras que el desarrollador valida y sigue el trámite desde la oficina virtual”, explicó Lezama.
En promedio, el proceso completo lleva 90 días, extendiéndose a 120 si es necesario realizar obras externas. Estos tiempos pueden variar según la complejidad de cada proyecto y de las condiciones específicas de la red
Respecto a la seguridad, si se cumplen las normas vigentes, que por otra parte es condición de aprobación, la instalación será perfectamente segura.
Lezama señaló: “Según el tipo de emprendimiento, ofrecemos ideas para instalaciones y equipos eficientes. En la Argentina hay proveedores de tecnología avanzada, y el gas natural es confiable y más económico que la electricidad”.
Con el proyecto de gas aprobado, se construye la instalación interna. Tras el tendido de cañerías y ventilaciones, el gasista pide la inspección parcial con cañerías descubiertas, carga fotos en AVM.
Una vez aprobada esta inspección, se cubren las cañerías, se instalan los artefactos y luego se solicita la inspección final. Si el caño externo abastece el consumo solicitado, se puede solicitar el alta del servicio, generar la orden de conexión y se colocan los medidores.
Si el caño externo no existe o es insuficiente, se requiere una extensión de red, por lo que debe contactarse al sector de obras por terceros para realizar el proyecto y solicitar presupuestos a empresas registradas.
Factores que explican el regreso del gas
El gas natural ofrece ventajas competitivas frente a la electricidad, informaron desde el sector inmobiliario. Su costo operativo es considerablemente más bajo y permite garantizar un suministro confiable, lo que resulta atractivo en un contexto de tarifas eléctricas elevadas y posibles interrupciones.
Además, la disponibilidad de equipamiento eficiente de proveedores locales facilita su incorporación a proyectos inmobiliarios.
Federico Rosbaco, CEO de Rosbaco & Partners, destacó que “el diseño de estos edificios responde tanto a la necesidad de reducir costos como a tendencias de sostenibilidad. En edificios de mayor tamaño, el gas se utiliza en sistemas centrales de agua caliente, disminuye costos energéticos y reduce el mantenimiento de instalaciones individuales”.
En paralelo, el gas natural es visto como una opción más amigable con el medio ambiente en comparación con otros combustibles fósiles, debido a sus menores emisiones de carbono.
Zonas donde se desarrollan los proyectos
Los nuevos edificios con gas se concentran en zonas del corredor norte de CABA, como Belgrano, Núñez, Palermo y Villa Urquiza. Estas áreas combinan una alta demanda habitacional con la presencia de infraestructura apta para soportar el servicio de gas.
También influyen factores como la valorización inmobiliaria y la preferencia de compradores por viviendas con servicios tradicionales.
“Por ejemplo, en edificios de alta gama, el gas sigue siendo el estándar para sistemas de calefacción, cocinas y agua caliente debido a su eficiencia y facilidad de uso”, dijo Rosbaco.
Medidas de eficiencia y seguridad
La utilización de cañerías de termofusión con alma de acero minimiza riesgos y asegura una mayor durabilidad. Asimismo, sistemas de ventilación mejorados y dispositivos eficientes contribuyen a reducir el consumo energético y el impacto ambiental.
Hernán Nucifora, CEO de Global Investments, destacó que “la incorporación de gas en proyectos grandes se combina con sistemas inteligentes que optimizan el consumo. Por ejemplo, termostatos programables y controles de temperatura centralizados permiten ajustar el uso energético de manera eficiente y cómoda para los usuarios”.
Costos y comparaciones con edificios eléctricos
La instalación de gas en un edificio promedio de 15 departamentos tiene un costo estimado de $20 millones, sin incluir artefactos. Aunque más costosa que un sistema eléctrico inicial, resulta más económica en el largo plazo debido al menor costo del gas.
“Por ejemplo, el consumo eléctrico puede ser hasta dos veces más caro que el gas natural”, precisó Rosbaco.
Además, el uso de gas reduce los costos energéticos de manera significativa en sistemas compartidos, como agua caliente central o calefacción por losa radiante.
No obstante, Nucifora subrayó que “los costos finales también dependen de factores externos, como la estabilidad de tarifas y el precio del gas importado. En el caso argentino, la producción local y la ampliación de gasoductos podrían consolidar un escenario más favorable”.
En cuanto a los valores de venta de las viviendas, Rosbaco afirmó que los valores de venta de las viviendas en estos edificios varían según ubicación y características del inmueble. “En general, los departamentos con eficiencia energética y sostenibilidad tienen precios competitivos, parten desde USD 106.000, especialmente para unidades de dos ambientes en zonas como Palermo”, dijo.
Precauciones a considerar
El uso del gas natural exige cumplir estrictamente las normas vigentes para evitar riesgos. Los usuarios deben realizar controles periódicos de las instalaciones y garantizar la correcta ventilación de los artefactos.
Además, se recomienda contratar profesionales habilitados para realizar tareas de mantenimiento y reparación.
Los desarrolladores deben involucrar a las distribuidoras desde las etapas iniciales del proyecto para evitar retrabajos costosos y asegurar el cumplimiento de estándares de seguridad y eficiencia.
Tendencias
En los últimos años, se implementaron medidas para reducir el consumo de energía en edificios, como el uso de carpintería DVH con vidrios dobles y cámara de aire, con aislamiento térmico y acústico.
”Además, la instalación de paneles solares en proyectos ubicados en Recoleta y Almagro, y el uso de revestimientos fotovoltaicos en otros edificios contribuyen a la eficiencia energética”, dijo Nucifora.
El reemplazo de luminarias convencionales por LED en áreas comunes permitió un ahorro del 80% en consumo.
Nucifora concluyó: “Estas acciones responden al aumento de tarifas y a la demanda de sustentabilidad. En proyectos en el mercado inmobiliario suburbano, la integración de arboledas mejora el entorno, reduce las temperaturas urbanas y disminuye la necesidad de refrigeración, benefician al medio ambiente”.