El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha atribuido la dimisión del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, de este lunes a su eventual política de aranceles, después de que prometiera imponer una tasa del 25 por ciento a todos los productos provenientes del país vecino.
«Estados Unidos ya no puede sufrir los enormes déficits comerciales y subvenciones que Canadá necesita para mantenerse a flote. Justin Trudeau lo sabía y dimitió», ha señalado en su plataforma Truth Social.
En el mismo mensaje, el republicano ha vuelto a referirse a Canadá como un «estado 51», asegurando que «si se fusionara con Estados Unidos, no habría aranceles, los impuestos bajarían muchísimo».
Asimismo, el magnate ha dicho que los canadienses «estarían totalmente asegurados ante la amenaza de los barcos rusos y chinos que los rodean constantemente». «A mucha gente en Canadá le encanta ser el estado número 51 (…) Juntos, ¡qué gran nación sería!», ha declarado.
Estas afirmaciones de Trump llegan después de que Trudeau haya presentado su dimisión este lunes como líder del Partido Liberal ante la cada vez mayor falta de confianza en las filas de la formación y la previsible derrota en las elecciones previstas para octubre, según las encuestas.
Los ministros de Finanzas y Exteriores canadienses, Dominic LeBlanc y Melanie Joly respectivamente, viajaron a finales de diciembre a Florida (Estados Unidos) en su segunda visita a Mar-a-Lago en un mes, para mitigar las preocupaciones de Trump sobre los migrantes y el fentanilo que cruzan la frontera, después de que éste esgrimiera los «extranjeros ilegales» y el «crimen y las drogas» para prometer la imposición de un arancel del 25 por ciento sobre todos los productos que entren al país desde México y Canadá.